Costumbres Festivas Afro-esmeraldeñas
Nacimiento.- El nacimiento de un niño, por lo general acompañado y ayudado por una comadrona (la madre y/o amigas) es netamente cosa de mujeres. Mientras la mujer está dando a luz, el marido esperando o caminando con los amigos, teniendo listo el aguardiente para festejar el evento. Una vez nacido el niño suele dar tres disparos si es varón y uno si es mujer. Las mujeres suelen simplemente visitar a la madre, ver al bebe y comentar el nacimiento o darle algunos consejos.
Bautizo.- La fiesta se hace en la casa del padrino o la madrina, que a través de este rito se hacen ‘compadres’ de los padres del niño, una relación, que tiene un fondo religioso y es muy respetada por la población de Esmeraldas. El rito del bautizo mismo es sencillo: se rezan tres Credos echando el agua del socorro en la cabeza del niño después de cada Credo y diciendo: “N.N., Dios te bautiza en el nombre del Padre, del hijo y del Espíritu Santo”. El niño tiene que estar vestido de blanco de manera que estén tapados los pies, se dice que con este vestido le va a hacer la mortaja a la madrina cuando se muera.
Después de que los padres sirvieron una comida a los padrinos e invitados, por la noche -según los medios económicos de los padres y padrinos- se hace un baile en la casa.
Luego, según los reglamentos de los sacerdotes de la zona, se lo “olea”. Actualmente se vuelve a dar nuevamente el bautizo por el sacerdote, evento que ya no tiene la misma repercusión social, ya que por el agua bendita echada en el primer acto el niño se hizo cristiano, siendo de esa manera más protegido contra los peligros del monte, a donde la mamá muchas veces tiene que llevarlo, y los peligros por parte de brujas y ánimas.
Chigualo.- En caso de que se muera un niño, más o menos hasta los 9-10 años, se acostumbra hacerle el ‘chigualo’, siendo responsabilidad económica de los padrinos. A los niños difuntos se los suele llamar angelitos. Ya que el angelito también tiene que ayudar a sus padrinos para alcanzar la gloria, una vez que se mueran ellos.
Al Angelito se viste de blanco dándole una corona y una palma de papel blanco, como símbolo del inmediato acceso a la gloria y se lo acomoda en la sala en un altarcito como se acostumbra para los Santos en los días de sus fiestas. Velándolo, de noche se le canta arrullos y chigualos acompañados por marimba, bombos, cununos, guazás y maracas. Son en parte los mismos arrullos que también se cantan para hacer dormir a los bebes vivos y en los velorios alegres que se sueles hacer a los Santos.
Pero la música es alegre ya que se considera causa de alegría que un angelito haya alcanzado la gloria. Los ritmos llevan a las mujeres cantoras a bailar, a veces la madrina baila con el angelito en brazo.
Después de la media noche se acostumbra hacer juegos que por un lado reflejan la situación de pérdida de un hijo.
El día siguiente pero siempre guardando las 24 horas, se realiza el entierro, llevando el angelito en una caja blanca a la iglesia. Se los entierra en posición con la cara hacia donde se levanta el sol o hacia el pueblo. A diferencia de los adultos que se los entierra con la cara mirando hacia donde se opone el sol.
En los días siguientes algunas mujeres tratan de quedarse acompañando a la familia del difunto ‘angelito’. En muestra de solidaridad acompañan sobre todo a la madre, para ayudarla a olvidar, acompañando día y noche.
Matrimonio.- Los afro esmeraldeños, por una serie de razones históricas, poco suelen casarse por lo civil o eclesiástico, ni consideran el estado de pareja como definitivo o único.
Cuando dos jóvenes se enamoran, cosa que a nivel rural a veces sucede sin que la comunidad se dé cuenta ya que no se conocen las manifestaciones de afecto en público, el joven se pone de acuerdo con los padres de la chica, los cuales generalmente no ponen ningún obstáculo. “Son cosas de la vida”. Se fija el día en el cual uno de los dos, generalmente la mujer, se cambia a la casa del otro. Ahí es que la comunidad se da cuenta y viene a visitar a la nueva pareja que tiene que brindar algo a los visitantes. A veces dependiendo de las mujeres se realiza la ‘parranda’, acto comunitario que muchas veces se acostumbra en las fiestas de Santos.
Velorio de un muerto.- Un evento de suma importancia es la muerte de un mayor, no solo por el vacío que causa social y económicamente sino porque del cumplimiento, con el ritmo funerario “depende del viaje del alma a su lugar”.
El día siguiente luego de 24 horas cumplidas, ya que siempre se cuenta de que unos muertos antes de cumplirse las 24 horas volvieron a vivir, se los lleva a la iglesia en el ataúd cargado en los hombros de los conocidos, allí se despiden los familiares, se dirigen al cementerio acompañados por la mayoría de la comunidad.
Las nueve noches que siguen al entierro se acostumbra a reunirse en la casa del finado para rezar el rosario. En la última noche se realiza la novena que es la despedida definitiva del alma del finado, “hasta ese momento se supone que el alma del finado se había quedado alrededor de la casa”. Para esta última novena se construye un altar con una pequeña escalera al pie de esta se realiza con una apariencia de ataúd, se empieza cantando como en el velorio y se reza tres veces antes de las doce o dos de la madrugada, se desbarata el altar formando un callejón desde donde estaba el altar hasta la puerta para que pueda salir el alma a su viaje definitivo que tiene que terminar antes que el gallo cante. Este momento es de suma tensión y atención, lleno de gritos, llantos, dando origen a una serie de creencias. Aunque a nivel urbano ya no se cantan alabados y se ha perdido una serie de elementos de estos ritos.
Las Fiestas.- Están principalmente las fiestas religiosas como; Navidad, Semana Santa, Fieles Difuntos, los días de algunos Santos Populares “San Antonio”, La Virgen del Carmen, La Virgen de la Merced, La Virgen de las Lajas, y demás Santos Patrones de las respectivas capillas.
Las Fiestas Cívicas.- Las fiestas Cívicas no tienen un rito con el cual se las celebra, y que existen lugares donde no funcionan las escuelas, no existe el impulso del profesor para hacer una velada o algo similar, simplemente se hace un día de vacación.
Cabe recalcar que entre las fiestas cívicas de mayor importancia están las siguientes:
- 5 Agosto, Independencia de Esmeraldas recordando en el contexto de la liberación de la esclavitud.
- 12 octubre, Día de la Raza.
Los Mitos.- La población afro esmeraldeña conocen una serie de mitos que se basan en su visión de las almas de los muertos, creencia traída del África. Como:
- Se cuenta de la presencia de almas que por la noche vienen a molestar o avisar algo; a recoger sus pasos por donde han estado en vida, esta creencia se mantiene en general en los velorios.
- Existen personajes que viven en el monte, manglar, rio, mar. A estos personajes se los conoce que por alguna razón están penando.
- La Tunda, una mujer que no cumplió con sus obligaciones en el hogar y que se cree que se lleva los niños al monte.
- El Riviel, el alma de un ahogado que anda en un “potro mocho”, hasta encontrar una persona para ahogarla también.
- El Duende, de sombrero grande al que le gusta enamorar a las chicas jovencitas.
- La Gualgura, que aparece en forma de gallina y otros más para las cuales se tiene respeto y hasta miedo.
También se conocen las brujas con sus secretos y hierbas, no solo saben hacer y curar maleficios sino también preparar supuestos brebajes para problemas amorosos, siendo esto su tarea principal y más buscada. Estas brujas se cree que se saben volver pájaros y como tales matan chupando la sangre a niños, demostrado por alguna señal de la cual se da cuenta la madre, se cree que estas brujas se reúnen en arboles gigantescos junto con su maestro y dueño de su alma que es el diablo.
Como se ha descrito estos personajes mitológicos están presentes en la vida de las comunidades rurales, no solo a través de los cuentos, sino también por las experiencias propias que se tiene con ellos sobre todo de noche. Todos estos mitos no son solo una representación del mundo del más allá, de la vida diaria, sino también tienen una función de protección como para evitar realizar actos malos sin dejar de ser mitos.